El problema de la contaminación atmosférica está en el foco de todos por los efectos que puede tener sobre nuestra salud y por las consecuencias que podrían plantear en nuestra forma de vida las posibles medidas para afrontarlo.
GPL y METANO, mirados desde el punto de vista ecológico, tienen muchos aspectos a su favor. Gracias a una constante innovación tecnológica, se han alcanzado resultados muy significativos.
El GPL y el metano son carburantes ECOCOMPATIBLES, por lo que tienen unas reducidas emisiones de sustancias contaminantes, como el monóxido de carbono, los hidrocarburos sin quemar, el dióxido de azufre, las partículas y los compuestos orgánicos volátiles;
También gases invernadero como:
· benceno;
· hpa (hidrocarburos policíclicos aromáticos);
Total ausencia de PLOMO.
Hay una casi total ausencia de AZUFRE.
Una mención importante merecen las PARTÍCULAS: el nivel de los tristemente famosos polvos sutiles PM10 y PM2,3 (que a menudo llevan a las limitaciones de tráfico urbano) en el GPL y metano debe considerarse prácticamente ausente.
Transforme su coche a gas: es la alternativa más ecológica y más ventajosa.
instalar un equipo de gas gpl o metano en su coche reduce notablemente los costes de carburante.
Se obtiene, en efecto, un gran ahorro respecto a la gasolina:
con el GPL del 50-60%
con el METANO del 60-70% a igualdad de km recorridos.
El GPL posee por su naturaleza características antidetonantes propias (alto número de octanos) y no necesita plomo u otros aditivos cancerígenos como la gasolina.
Las emisiones de un coche con GPL están libres de partículas pesadas, de benceno, de azufre y aldehídos, que son fuertemente cancerígenos y están presentes en los carburantes ordinarios. El GPL es responsable solamente de manera mínima de la formación del smog en las ciudades, que está causado sobre todo por los polvos sutiles (PM) y por las emisiones gaseosas de óxidos de nitrógeno (Nox).
Estas sustancias, en efecto, están presentes en concentraciones muy reducidas en las emisiones de los coches con GPL respeto a los de gasóleo y gasolina. EL GPL no contribuye al smog fotoquímico, responsable de la elevada contaminación estival en nuestras ciudades. Las moléculas del propano, principal constituyente del GPL, son muy estables y por tanto no reactivas en presencia de la luz solar.
El GPL es una mezcla de gas butano y propano producido a partir del refinado del petróleo. Su producción no genera contaminación industrial y tiene una doble ventaja medioambiental: el GPL no recuperado para la utilización sería inútilmente quemado en la cabeza de los pozos o en las refinerías.
Actualmente también Italia ha incorporado la normativa europea que regula los niveles máximos de emisiones contaminantes de todos los vehículos a motor y la totalidad de los fabricantes de equipos de GPL hace tiempo que ya han adecuado sus sistemas para ajustarse a los parámetros Euro 3 (en vigor desde el 1 de enero de 2001). Además, los nuevos sistemas para transformar vehículos de gasolina actuales en vehículos que respetan los criterios ecológicos de la homologación Euro 4 y Euro 5 deben tener unos parámetros muy restrictivos y respetar las EOBD.
En Europa solamente la GFI ha publicado las homologaciones de los sistemas de inyección de gpl secuenciales y puestos en fase en cumplimiento de las nuevas reglamentaciones R115.